18 de junio de 2008. 168 km, 18,51 km/h, 1212 mt desnivel. Un día de lo
peor, lo he pasado muy mal, viento en contra todo el día, ha sido muy
duro psicológicamente y eso que el terreno me favorecía. Decidir ver la
Mezquita Azul de Tabriz, nada que ver con la de Estambul, en Persia no
se construyen esos altos y estilizados minaretes sinó unas cúpulas
redondas, estrechas al principio, se hacen más grandes y acaban en
punta, muy bonitas. Salir de Tabriz implica subir un puerto suave de 40
km que te lleva a 2200 mt de altitud, con pistas de esquí incluidas, el
viento me ha hecho ir lentísimo. Paré a comer en Bostanabad un kebap,
eran más de las 15:00 h, al continuar veo un cartel de Mayaned a 100 km,
el viento era totalmente frontal, la carretera bajaba lentamente, esto
me ayudó, pero era imposible pasar de 20 km/h bajando, miraba como el
viento doblaba los altos chopos que bordeaban la carretera, me levantaba
del sillín para pedalear, notaba mis labios cortados. Faltaba poco para
anochecer, me quedaban 30 km, un chico para su coche y me hace señas,
nos presentamos, le cuento mi aventura y me dice que tengo que contar
mis experiencias a sus padres, me invita a pasar la noche con su
família. Llegué a Medianeh a las 21:00h, era de noche, Arash me esperaba
con su coche, lo seguí hasta su casa. Esta etapa va dedicada a su
familia y a la hospitalidad iraní, gente maravillosa.
Anónimo Anónimo dijo...
ResponderEliminarHola Dieguito, soy el Pelos. Me alegro que todo vaya bien. A lo tonto ya se han pasado dos meses y parece que fue ayer cuando saliste. Cuídate mucho, un abrazo y cuando vengas a este país seremos ya campeones de Europa.
23 de junio de 2008 04:23
Suprimir
Anónimo Anónimo dijo...
Hoy día 23, por fín recibimos tus noticias, aunque solo son las del día 18. Ya comprobamos que tu ruta no es precisamente un camino de rosas, pero no te dejes vencer por las dificultades, especialmente ese dichoso viento siempre fastidioso.
Eres un valiente y estoy segura de que no habría muchas personas dispuestas a realizar tu hazaña, así, en solitario.
Como ves, en ese camino ("no de rosas") siempre encuentras gente estupenda que te brinda su amistad y hospitalidad. Eso te compensa de lo amargo de otros momentos.
A ver si esta noche recibimos los reportajes que faltan.
Desde Tenerife (aquí también siempre hace viento y a mi me parece que todas las calles son cuesta arriba, claro está que no intento hacer comparaciones, que conste) recibe nuestro cariño. Gloria, Sergio, Nuria y los enanos diabólicos.
23 de junio de 2008 04:39